Por la gracia de Dios he gozado de la bendición de poder escribir material Bíblico para beneficio de la iglesia, y de todos aquellos que andan en busca de la verdad. Los autores de la Biblia al igual que muchos de los instructores de Biblia que he tenido en la Escuela de Predicación de Brown Trail, la Universidad Cristiana de Heritage y la Universidad de Amridge han sido de gran aliento para mi trabajo de redacción en la iglesia del Señor. 

Por los últimos 20 años he tenido un profundo y sincero deseo de escribir folletos, comentarios de la Biblia y libros de referencia para el crecimiento espiritual de la iglesia. Gracias le doy a Dios por poner en mi corazón este sincero deseo. 

            A través de los años he sido grandemente motivado por hermanos que residen en Estados Unidos, México, Centro y Sur América, al igual que lugares en Europa. Tales hermanos han tomado el tiempo para informarme de cómo el material que he escrito ha sido de gran ayuda para el crecimiento espiritual de muchos hermanos en Cristo. Siempre ha sido de gran ánimo personal cuando conozco hermanos en campañas evangelísticas o conferencias donde me hablan sobre cómo el material que he escrito les ha ayudado en gran manera en su crecimiento espiritual. 

Mucho del material que he escrito, gracias a Dios, a sido utilizado en institutos Bíblicos, escuelas de predicación, etc. Gracias le doy a los hermanos que de una manera u otra han considerado el material que he hecho disponible a lo largo de mi experiencia en el ministerio de la predicación. 

            En lo personal puedo decir con toda sinceridad que me es un privilegio y bendición poder compartir lo que escribo. Lamentablemente, este no es el caso con muchos predicadores que he conocido. Uno de ellos, sin mencionar su nombre, hizo el comentario de que le toma mucho tiempo escribir como para solamente regalar su material a otros. Le doy gracias a Dios que el apóstol Pablo, Pedro, y otros autores de la Biblia no tuvieron esta errónea mentalidad. De serlo así, no tuviéramos una copia de la Palabra de Dios. 

Otro predicador y anciano de una iglesia hizo el comentario de que la iglesia de Cristo no se enfoca en escribir, sino en evangelizar. Esta es otra mentalidad con la que personalmente no estoy de acuerdo. Reconozco que esta es la opinión de mi hermano; sin embargo, es una opinión errónea. Creo que la iglesia de Cristo puede hacer ambas cosas—evangelizar y proveer material escrito para el crecimiento espiritual de la misma. 

Otros predicadores simplemente no ven la necesidad de proveer material escrito para el beneficio espiritual de la iglesia. Muchos de ellos tienen el conocimiento en ortografía y gramática; sin embargo, no ponen a trabajar los talentos que tienen. En lo personal creo que el periodismo, palabra que significa: “actividad consistente en la recolección y elaboración de la información para su difusión” (es.thefreedictionaryonline.com) necesita formar parte del trabajo de la iglesia del Señor. La obra de evangelismo también se puede llevar a cabo a través de lo escrito. Puedo argumentar que en los 30 años que tengo en el cristianismo me he beneficiado de todo el material que hermanos en Cristo han escrito tanto en inglés como español. Muchos de los libros que tengo en mi biblioteca personal de aproximadamente 4,000 libros ha sido escritos por predicadores de la iglesia de Cristo. Cuando me veo en la necesidad de aprender sobre el significado de algún pasaje en particular, dichos comentarios y libros me han sido de gran ayuda. Por ello, le doy las gracias a todos mis hermanos que han tomado el tiempo para escribir y compartirlo con muchos.  

            Por lo tanto, en este breve artículo deseo mostrar algunas razones del porqué comparto el material que escribo. Espero que estas razones puedan ser un medio de aliento para todos mis hermanos predicadores que tienen la capacidad de escribir, pero que todavía no lo están haciendo.

Comparto el material que he escrito porque…

1. Deseo imitar el ejemplo de mis hermanos en Cristo del primer siglo que dedicaron tiempo para producir material escrito.
2. Deseo imitar el ejemplo de mis instructores de Biblia que han producido una gran cantidad de libros para beneficio de la iglesia.
3. Reconozco que es un privilegio hermoso poder escribir y compartir la Palabra de Dios. 
4. Deseo que mis hermanos puedan comprender lo que la Palabra de Dios enseña en su idioma en el que fue originalmente escrito. 
5. Deseo producir material que mis hijas, mis nietos y demás familia puedan estudiar aun después de que yo haya partido de este mundo. 
6. Deseo que lo que he escrito no se quede en un cuaderno o computadora donde hermanos no podrán beneficiarse de dicho material. 
7. Deseo proveer material que pueda ser de gran ayuda para futuros predicadores de la iglesia del Señor. 
8. Deseo que después de 50 años muchos todavía puedan beneficiarse del material que tuve la oportunidad de escribir. 
9. Deseo que nuestros jóvenes puedan gozar de material escrito para su crecimiento espiritual. 
10. Deseo que hermanos activos de la iglesia puedan tener material de donde estudiar para predicar y dar clases Bíblicas a la iglesia. 
11. Deseo que todos los hermanos que invirtieron en mi educación Bíblica se sientan contentos de que su inversión espiritual no fue en vano. 
12. Deseo dar la honra y la gloria a mi Dios a través de material sano en la doctrina.
13. Deseo instruir a la iglesia en la sana doctrina. 
14. Deseo que la iglesia esté muy bien informada en cuanto a lo que enseño de la Palabra de Dios. 
15. Deseo que mi corazón siempre sea un corazón dadivoso y no egoísta. 
16. Deseo que mis hermanos en Cristo se puedan beneficiar de las horas y horas de mi estudio personal de la Biblia. 
17. Deseo que el material que escribo pueda llegar a muchos países de este mundo.
18. Deseo proveer material para que personas que no han obedecido el evangelio puedan aprender sobre la salvación que Dios les ofrece en Cristo.
19. Deseo aprovechar a lo máximo el tiempo que Dios me permite en el estudio de Su Palabra. 
20. Deseo presentar perfecto en Cristo Jesús a todo hombre. 

Estas son algunas de las razones por las cuales comparto el material que Dios me permite escribir. Como lo he dicho anteriormente, es mi deseo y oración que estas razones sean suficientes como para persuadir a mis hermanos predicadores para que escriban y compartan material Bíblico para beneficio de la iglesia. Sin embargo, reconozco que al final del día, no muchos prestarán atención al llamado que con mucho amor y preocupación les hago. Permita que la gracia de Dios trabaje en su vida en el área de la redacción Bíblica. Sea Dios quien nos ayude a siempre tener el profundo deseo de instruir a la iglesia en el camino del Señor. ¡A Dios sea siempre la gloria y la honra!